azar

Prometo que será la última y luego me doy un descanso. En serio, lo prometo, pero a veces resulta necesario dejar que las cosas salgan como también es bueno resguardarlas del frío. No vengo a decir nada que no se haya dicho; más bien sólo vengo a usar mi tiempo en jugar un poco conmigo y con quien lea.¿ Acaso es mucho pedir?. No voy a transferir nada que no pase por mi filtro o al menos eso supongo que hago cada vez que digo algo, pero a veces uno no puede evitar que ciertas cosas se salgan del cuadro y ahí es donde surge el azar. No creo que sea algo perjudicial en todo caso, tampoco que sea un fenómeno muy complejo, sino más bien es todo lo que no entendemos cómo se da que no podemos controlar sin entrar en una terminología que no viene al caso. Pero hay caminos que le dan una respuesta a todo, porque es necesario que alguien se dé el trabajo de responder las cosas aunque esté en el error, porque no hay nada peor que darse cuenta que mañana las cosas no serán como ayer.Y si bien, esto no quiere decir que dejarse llevar sea mi  breve respuesta, tampoco es dar a lo otro por superado quizás porque dentro de todo momento aún no hay cabida para ver con otros ojos. Entonces si miramos atentamente las cosas no sólo nos vamos a encontrar con los detalles , y las fracciones de esos detalles y sus múltiples micropartes, sino además no vamos más que a ver cada vez más a fondo el mismo cuadro suponiendo que todo permanecerá ahí. Pero tampoco se trata de dividir todo esto en A , B o C ; creo que es suficiente todo eso de dar direcciones a un mapa que nosotros hemos inventado pero del cual no tenemos idea por qué lo hicimos así; y ahí es dónde supongo que está todo el asunto. De tanto poner las cosas en orden, de tanto buscar sobre sus partes el cómo o de tanto preguntarse el por qué de algo que no entendemos surge el azar. No de la naturaleza, sino de nuestra naturaleza. Meditar sobre aquello es parte de usar nuestro tiempo en ciertos casos, al igual que otros investigan a fondo los objetos para manipularlos, pero ambos caminos no son más que expresiones de lo mismo( aunque unos nieguen a otros). Pero también es cierto que desde el azar se ha hecho ciencia, también esa forma se ha transmutado a otra cosa porque no podemos aceptar dentro de nosotros que el azar sea nuestra culpa, y ahí de donde surge la culpa y otras sensaciones producen una que otra parábola simpática sin más razón que seguir esa parte que no entendemos de fondo, pero que tiende a surgir una , otra y otra vez a veces sin percatarnos como también algunos se dan cuenta pero lo asumen como un error de su sistema, en tal caso surge la llamada enfermedad con su apellido que también puede ser leída desde otros ojos y así sucesivamente ve uno como desde un punto tan simple empieza a entretejerse la complejidad que no se detiene sino que ,al contrario, no deja de dar más y más raíces que al paso del tiempo son evidencias y no curiosas consecuencias. Pero la prueba de esto es un juego bastante plausible en el caso de que alguien necesite demostración dado que e justamente lo opuesto que pasa cuando se adentra a eso: a un camino que nunca tuvo punto de partida ni de retorno.