Por último: dejen de comprar tanta wea!!!! y disfruten!
Parto con una cita de Cioran que me ha gustado mucho, es el comienzo de "El árbol de vida", muchas veces que leo al rumano me pongo a pensar en el lenguaje, su significado, sus aperturas y sus límites, ¿hemos alguna ves de entenderle?
Y si nos entendemos, ¿qué hacemos?
Existen distintos tipos de movimientos (sociales y de otros tipos) en contra de ciertos vicios, males, crímenes y demás. ¿Por qué no hay ninguno en contra del lenguaje? Es que acaso no lo ven; mírenme aquí, hablándoles, provocándoles este incordio, este incomodo sentimiento que no pueden clasificar, ¿será enojo?... será rabia, será desconcierto, será risa, será que me entienden y por lo mismo no debería existir, mírenme aquí, hablándoles y mírense ustedes entendiéndome, cuanto desperdicio, cuanto mal hay en nosotros, ¿qué más destructivo y violento que el lenguaje? ¡Nada!, si no pudiéramos hablar seríamos felices y lo mejor de todo es que nadie lo sabría. Éste es, el lenguaje, la mayor de las maldiciones y la mejor de las herramientas para destruirlo a sí mismo, eso es lo hermoso del lenguaje, su maldición y su hermosura, el entenderlo, que lo entendamos y por entenderlo le destruyamos. Y, por mal entenderle le seguimos creando. En los malos entendidos y reinterpretaciones es que esta mala hierba prolifera, en el entenderla y en el no entenderla.